medio limón

 Solo hay medio limón en la nevera. 

Los platos se encuentran en su armario,

uno encima de otro,

y los tenedores se llenan de polvo en la encimera.

Jamás había sentido un pánico comparable

al que siento ante la idea de masticar

tragar, 

y que lo que trago se acumule en mí. 

Mi poder de autodestrucción va en aumento.

Soy consciente del daño que me hago,

mi inestabilidad empeora por momentos. 

Amélie Nothomb y Delphine de Vigan

llenan mis días.

Me miro al espejo una y otra vez, 

y ante mí aparecen todas las partes

de mi cuerpo

que desearía que no existiesen. 

Estrías en la curva de la guitarra,

carne que no soporto tocar,

los brazos,

los muslos, 

cada detalle de mí es imperfecto a mis ojos. 

Me convenzo de que pararé, 

que cuando el número sea el que quiero arrasar 

volveré a ser la niña risueña que solo sabía ser feliz. 

Sin embargo, la línea de meta nunca llega. 

No importa lo que haga, 

ese momento de paz no está en el calendario. 

El hambre me hace sentir viva, 

lo visceral sonreír.

El pensar que por primera vez 

yo tengo el control sobre todo.

Mi existencia.

La gente me repugna, 

tiro la primera piedra en discusiones

que no tienen fundamento. 

No quiero a nadie a mi alrededor,

porque pienso que nadie lo entendería. 

Sin embargo, 

cada vez que estoy sola, 

las voces logran cegar mis oídos.

Yo tengo la verdad absoluta.

Sé que está mal.

Tengo que ir a la cocina y la ansiedad se apodera de mí, 

no sé si sabré controlarme. 

¿Cuándo he dejado que se desarrollase 

esta versión de mí?

¿Cómo puedo ver belleza 

en los huesos?

Lloro sobre fotografías.

Mi filosofía es que solo lograré quererme

y que me quieran

cuando sea perfecta. 

Lo que mi mente entiende por perfección.

Lo inalcanzable, 

que no es compatible con respirar. 

¿Es esto fruto del pasado?

¿De lo que siempre he dicho que no me dañó 

en absoluto?

¿Soy acaso débil?

No.

Hace falta mucha fuerza para ser tan cruel

con una misma. 

Para repetirse una y otra vez, 

que tu organismo no necesita

mas que agua con limón. 

Abro la nevera. 

Tomo el medio limón en mis manos. 

Lo tiro a la basura.