¿Es real?
No queda
ni un rincón en el cielo
al que no le haya rezado
que seas mío.
No hay
madrugada
donde mi cama
no me prohiba
recostarme en tu lado,
por si vuelves.
Tienes que volver,
de eso estoy segura.
Vas a volver,
y no vas a quedarte.
Y yo seguiré
esperanzada de que
pronto
ambos cerraremos
la puerta,
y ninguno querrá irse.
Todo va bien,
¿sabes?
Mas ni el canto
de los pájaros
ni el café recién hecho
ni los escritos
acabados y orgullosos,
logran llenarme,
porque me faltas
tú.
Ven,
por favor,
no soporto
el silencio entre nosotros.
No soporto
no ser yo quien te haga feliz.
No soporto
no poder estar juntos.
Que cada intento
sea fallido.
Que cada llamada
sea secreta.
Que cada lágrima
sea culpable.
Que nadie entienda
por qué sigo aquí.
No los culpo.
Ellos ignoran,
que existo
solo cuando soy dueña
de tus palabras.
Imaginando
que en ese preciso momento
estás pensando en mí,
en nosotros.
¿Piensas en nosotros?
¿O es mi recurrencia
lo que nos mantiene vivos
en un lugar
que solo yo visito?
Siempre lo defenderé,
mi amor,
porque este amor,
es real.
Para mí,
es real.
Y prefiero seguir
creyendo que eres
quien siempre he creído saber,
que seguir viviendo
sin ti
sin mí
sin nosotros.
Vuelve,
déjame besar tus labios
que tanto deseo.
Esta noche,
igual que ayer,
mantendré tu lado
de la cama
caliente,
y podrás acostarte,
cuando cerremos la puerta.
Comentarios
Publicar un comentario